El fuego es mucho más que calor.
Es el principio del ritual, el corazón de cada asado.
Y aunque parezca simple, hacerlo bien es un arte que separa al improvisado del verdadero asador.

En este post te contamos cómo lograr un fuego parejo, duradero y digno de tus mejores cortes.

1. 🔥 ¿Leña o carbón? ¿Qué conviene?

Carbón: práctico, rápido, ideal para espacios urbanos.
Leña: sabor ahumado, brasas lentas, más conexión con lo ancestral.

💡 Si podés, mezclá ambos: usá leña para iniciar, y carbón para estabilizar.

2. 🪵 Tipos de leña recomendados

• Quebracho colorado: brasas duraderas.
• Espinillo: chispea, pero da gran calor.
• Mistol, algarrobo, eucalipto: buenas opciones para equilibrar.

⛔ Evitá maderas resinosas (pino) o tratadas químicamente.

3. 🔥 Técnicas para encender sin dramas

A. Método tradicional (pirámide):

• Colocá bollitos de papel abajo.
• Encima, ramas o leña fina.
• Luego, carbón o trozos más grandes.
• Encendé desde varios puntos.

B. Cruz o jaula:

• Ideal para usar solo leña.
• Cruzá troncos finos y encendé desde el centro.

C. Encendido con brasero o chimenea:

• Más controlado, ideal si querés mantener brasas constantes durante horas.

4. 🌡️ ¿Cómo sabés que el fuego está listo?

• Si el carbón está blanco por fuera y rojo por dentro, ya podés empezar.
• Si usás leña, esperá a tener una base estable de brasas.
• No pongas la carne sobre fuego alto directo si no sabés manejarlo: mejor brasas que llamas.

5. 🚫 Errores comunes que arruinan tu asado

• Usar acelerantes como alcohol o combustible (además de peligroso, cambia el sabor).
• No dejar que el fuego madure: la ansiedad es enemiga del buen asador.
• Apurar el asado con fuego demasiado fuerte: mejor lento, seguro y parejo.

✨ Consejo Filo y Brasas

El fuego habla. Tenés que mirarlo, respetarlo y escucharlo.
Si lo apurás, se te va. Si lo descuidás, se apaga.
Cebate un mate, respirá profundo y dejá que las brasas hagan su magia.